Fiesta navideña en el arciprestazgo «Perifèria»

12/12/2008
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El arciprestazgo «Periferia» formado por las parroquias San José Obrero (Magraners), San Agustín (la Bordeta), San Antonio María Claret (Balàfia), Virgen de los Pobres (Secà de Sant Pere), y Santísimo Salvador (Pardinyes), hemos celebrado el encuentro anual que se hace próximo a Navidad.

La celebración ha tenido lugar en la parroquia de Pardinyes, y ha sido presidida por su párroco, y al mismo tiempo arcipreste de la «Pperifèria», Mn. Joan Jové; y concelebrada por los salesianos P. Joan Valls y P. Àngel Pinto, párroco y vicario de las parroquias de la Bordeta y Magraners; por los claretianos P. Nemesi Solà y P. Lluís Vila, párroco y vicario de la parroquia de Balàfia; y por los sacerdotes Mn. Josep Anton Jové y Mn. Jesús Pelegrí, párroco y adscrito de la parroquia del Secà de Sant Pere.

Ha sido una celebración familiar, muy bien preparada, en la que se ha incidido en la necesidad de sentirnos grupo, de sentirnos arciprestazgo, de aquí que en la entrada se nos ha entregado una piña con la inscripción: «Todos hacemos piña. Somos arciprestazgo.» Y han participado un centenar de personas. El encuentro estaba abierto a todos los feligreses de las parroquias mencionadas, pero prácticamente sólo han asistido aquellas personas que forman parte de algún grupo parroquial: Cáritas, Catequesis, Liturgia, etc.

Dado que el arciprestazgo trabaja durante este curso el documento de los obispos vascos «Renovar nuestras comunidades cristianas», unos jóvenes han presentado, a la manera de pastores que ofrecen presentes a Jesús en el pesebre, los cuatro grupos que hay que atender pastoralmente: Los creyentes motivados y comprometidos, los cristianos practicantes, los cristianos ocasionales y los alejados de la vida de la comunidad. Es por eso que en la homilía, Mn. Joan Jové nos ha invitado a tener esperanza y ser personas de esperanza. Como los primeros apóstoles, somos enviados a anunciar la Buena Nueva de Jesús allí donde estamos, sin ningún tipo de miedo, pues, sabemos que Jesús, tal como prometió, estará con nosotros hasta el fin de los tiempos.

Tanto las plegarias como las ofrendas han sido presentadas por representados de cada parroquia. Y una joven ha leído una plegaria universal, donde, a modo de parábola, nos ha invitado a trabajar para que nuestro corazón sea como un árbol de raíces profundas y ramas anchas donde acoger a todo el mundo en su diversidad y procedencia.

Al acabar la celebración eucarística hemos pasado a los locales parroquiales para tener un rato de convivencia y tomar un «pica-pica» con aquello que cada uno había llevado. Antes de despedirnos, claro está, nos hemos deseado una Feliz Navidad.

El próximo encuentro arciprestal está previsto para el próximo 8 de febrero, a las 5 de la tarde, en la parroquia del Secà de Sant Pere. Entonces reflexionaremos sobre el hambre en el mundo, dentro de la campaña de Manos Unidas. 

Conxita López Torres